Rinomodelación en Zaragoza

Es un tratamiento estético mínimamente invasivo que permite modificar la forma de la nariz sin cirugía, mediante la infiltración de ácido hialurónico en puntos estratégicos. Es ideal para suavizar el caballete, elevar la punta nasal, corregir asimetrías leves y conseguir una nariz más armónica y proporcionada con el resto del rostro.

La rinomodelación es un procedimiento no quirúrgico que se realiza con rellenos dérmicos como el ácido hialurónico. No requiere anestesia general, tiene una recuperación rápida y es reversible. La rinoplastia, en cambio, es una intervención quirúrgica permanente con un postoperatorio más largo. La rinomodelación es ideal si buscas un cambio estético sin pasar por quirófano.

El efecto de la rinomodelación con ácido hialurónico suele durar entre 12 y 18 meses, dependiendo del tipo de producto utilizado, el metabolismo de la persona y los cuidados posteriores. Aunque el ácido se reabsorbe con el tiempo, la estructura nasal suele mantenerse más armónica que antes del tratamiento.

Es un tratamiento prácticamente indoloro. Se aplica una anestesia tópica local, por lo que solo se percibe una leve presión durante la infiltración. La mayoría de las personas describen la sensación como molesta pero perfectamente tolerable.

Sí, siempre que se realice con productos de calidad y por personal sanitario titulado con experiencia. El ácido hialurónico es un material biocompatible y reabsorbible, ampliamente utilizado en estética facial. En manos expertas, los riesgos son mínimos y el procedimiento es seguro.

Depende de cada caso. Si has pasado por una rinoplastia previa, será necesario realizar una valoración personalizada para comprobar si la piel, la vascularización y los tejidos permiten una rinomodelación con ácido hialurónico sin riesgo.

Sí. Uno de los principales beneficios del ácido hialurónico es que es reabsorbible y reversible. Si fuera necesario, se puede aplicar hialuronidasa para disolver el producto. Esto aporta seguridad y tranquilidad, especialmente en primeros tratamientos.

El efecto es visible de forma inmediata, aunque puede haber una leve inflamación los primeros días. El resultado definitivo se aprecia alrededor del día 30, cuando el producto se ha asentado por completo y los tejidos se han adaptado a la nueva forma.

Aunque el producto se reabsorbe con el tiempo, la estructura nasal suele mejorar respecto al estado inicial. Esto ocurre porque el ácido estimula ligeramente la producción de colágeno y puede aportar una base más equilibrada, incluso tras su desaparición.

Una enfermera con formación en estética tiene la precisión, seguridad y experiencia clínica necesarias para realizar este tipo de procedimientos. Acostumbradas a pinchar con destreza y suavidad, aportan un enfoque técnico y humano que garantiza el confort, la higiene y un resultado natural.